Cortadora de plasma
La cortadora por plasma AREBOS corta chapas metálicas con una forma específica o produce recortes metálicos a partir de una chapa. A diferencia de las cortadoras láser, nuestro sistema de corte por plasma AREBSOS no sólo puede cortar aceros estructurales. Se pueden cortar casi todos los metales conductores. Estos incluyen, por ejemplo, aceros al cromo-níquel de alta aleación, todos los aceros para herramientas templados y no templados, hasta metales no ferrosos como el aluminio y sus compuestos, latón, cobre y fundición gris.
No requiere conexión eléctrica: La cortadora por plasma AREBOS sólo necesita un suministro de aire comprimido y una fuente de alimentación. Además, su forma compacta hace que ocupe muy poco espacio y, por tanto, sea fácil de almacenar. El aparato se utiliza para realizar cortes de hasta 12 mm en acero. Como los cortes son muy limpios y suaves, apenas es necesario repasarlos.
Corte eficaz a temperaturas extremadamente altas: el mecanismo que hay detrás: El aire de la antorcha de plasma se calienta a una temperatura extremadamente alta mediante un arco eléctrico. El chorro de corte por plasma altamente focalizado funde los metales con gran rapidez y su elevada energía cinética expulsa el metal fundido de la ranura de corte.
Funciona con aire comprimido normal: Cuando se trabaja con nuestra cortadora de plasma AREBOS, se utiliza aire comprimido en lugar de gas técnico. Los resultados son sorprendentes y las ventajas son fáciles de reconocer: Conseguirá una calidad de corte casi perfecta, que se acerca mucho a la calidad del corte por láser, pero a un precio mucho más favorable.
Trabajo preciso gracias a la alta velocidad: Otras ventajas impresionantes frente al oxicorte son la alta velocidad de corte y la excelente capacidad de automatización de los procesos. Gracias a la producción de alta calidad, se pueden producir contornos internos y taladros más pequeños que con el oxicorte.
Hábil, limpia y cuidadosa: Con esta hábil cortadora de acero de AREBOS, también se protegen de forma inteligente las piezas a procesar. La alta energía del chorro de plasma corta el material tan rápidamente que el material circundante no se calienta tanto como con el oxicorte, lo que se traduce en una menor distorsión térmica.